No has experimentado Alicante hasta que te hayas familiarizado con la parte más antigua de la ciudad. Fue fundada por los moros en el siglo VIII, pero conquistada por los cristianos en el siglo XIV. La puerta de entrada al casco antiguo se realiza a través de uno de los grandes arcos del ayuntamiento del siglo XIX. En el interior hay un distrito con cerca de 2.700 habitantes.
Además, un número indeterminado de turistas visitan esta zona de calles estrechas, espacios abiertos, restaurantes y edificios antiguos.
La Calle Labradores es una de las calles que debes visitar. Hay muchos restaurantes adicionales aquí.
La Catedral de Sant Nicolás, del siglo XVIII, es uno de los hermosos edificios del casco antiguo. La entrada es gratuita todos los días.
La Basílica de Santa María del siglo IX es la iglesia más antigua de la ciudad. Esta iglesia gótica/barroca también está abierta al público todos los días.
El casco antiguo está situado al pie del Monte Benacantil, donde se encuentra el castillo de Santa Bárbara.
Una de las zonas más pintorescas es el Barrio del Santa Cruz. Es un hermoso barrio con casas bien mantenidas y ricamente decoradas con arte y flores.
En la calle superior las casas son en parte cuevas. En el interior, los apartamentos se adentran en las montañas.
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Excursión de la semana: El casco antiguo de Alicante. Se adapta a todos. Hay bastantes escaleras en el Barrio Santa Cruz.
Para llegar: Buscar Ayuntamiento Alicante en Google Maps. Allí encontrarás la entrada al casco antiguo. A partir de ahí, sólo es cuestión de emprender un viaje de descubrimiento.
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